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La sociedad tiene una extraña y contradictoria relación con las palomas, esas aves con quienes compartimos espacios urbanos. Por una parte son rechazadas de forma sistemática, con el pretexto de son animales nocivos y sanitariamente perjudiciales.

La gente se ha acostumbrado a repetir las muletillas como que son “ratas  con alas”, que “transmiten enfermedades” y lo “ensucian todo”, y al final, como cualquier bulo o leyenda urbana, se convierten en frases que pasan de boca en boca, sin que nadie se haya molestado en confirmar o contrastar estos datos. Aquí tienes algunos datos al respecto, basados en la ciencia y no en el prejuicio ni en el rumor.

Por otra parte, las palomas son identificadas, en el imaginario colectivo, como un símbolo de paz y buenaventura, representado la inocencia y la alegría. Es frecuente que se organicen sueltas masivas de palomas en eventos conmemorativos como bodas y otras celebraciones. Esas mismas aves que tiempo después serán atropelladas, molestadas o exterminadas por dictado de algún bando  municipal. También son altamente codiciadas por los amantes de la colombofilia, quienes las cruzan, las crían y las presentan a concurso.

En ambos modos de relación con las palomas, el abuso especista es la norma. Medie el “amor” o medie el odio, la paloma sufre y muere.

Los torneos de palomos deportivos son más comunes de lo que pensamos. Son similares a los concursos de razas caninas, en este caso los participantes son palomos conocidos como “buchones”, característicos por tener un buche desproporcionadamente grande. Al igual que muchas razas de perros han sido manipuladas genéticamente para lograr determinadas características físicas, el caso de los buchones también exige una selección muy específica a la hora del cruce. Este tipo de selección antinatural, se hace para favorecer rasgos estéticos a gusto del humano, y por lo general suelen ser deformidades. Esto acarrea multitud de problemas de salud, incapacidad para desenvolverse en su día a día, desarrollo de tumores, etc.

Los buchones se utilizan en un tipo de competición conocida como Pica, que consiste en que un grupo de machos hormonados y en estado de excitación sexual acosen a una hembra. Aquí puedes leer más información sobre esta tradición deportiva.

Otra raza artificial es la paloma colipava, en la que destaca su blanco níveo, su espectacular cola y su pequeño pico. Muchas de ellas tienen un pico tan minúsculo que no pueden ni alimentar a sus polluelos, por lo que los criadores suelen reservar a algunas palomas nodrizas para sustituir a estas madres  premeditadamente incapacitadas. Estas aves, que parecen de mentira, se emplean en las bodas para hacer emotivas sueltas de palomas blancas en un falso espectáculo de libertad y buenas intenciones. Sus posibilidades de sobrevivir son ínfimas.

Asociaciones como Corazón de Paloma, dedican su esfuerzo y todos sus recurso a rescatar palomas de todo tipo, entre las que se encuentran aves de raza desechadas por enfermedades o gravemente maltratadas.

Desde El Hogar te invitamos a indagar, a ver más allá de tradiciones y argumentos repetidos sin pensar. Detrás de todo lo que nos han contado sobre los animales, hay una mentira o una verdad a medias. Solo tendrás información veraz en sitios libres de especismo como los santuarios de animales.

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