Romeo es una tórtola turca que no puede volar. Hace unos meses una chica se puso en contacto con la Plataforma Animalista de Sant Cugat para ofrecerse como casa de acogida para palomas en recuperación. Les contó que su abuela, una señora de 90 años, había rescatado hacía un par de años a una tórtola que no volaba. La mujer, con toda la buena intención, la cuidó y la tuvo en su casa todo ese tiempo, pero nunca la llevó al veterinario.

Al conocer el caso, llevaron a Romeo al veterinario, pero les dijeron que no se podía hacer nada para solucionar esa fractura mal soldada. Creyeron que ya estaba en un punto un poco crítico de estrés porque empezó a picarse las alas. Romeo es tímida y algo asustadiza. La señora que la cuidó durante tanto tiempo se despidió de ella con mucha tristeza por la separación, pero entendió que lo mejor para Romeo era estar en un lugar adaptado a sus necesidades y con otras palomas. Así fue como llegó Romeo al Hogar en julio de 2019.