Todos los mamíferos producimos leche, sin embargo, cada especie produce la óptima para sus hijos, y, dependiendo de las necesidades, la composición es diferente.
Así, la leche de las vacas, que son rumiantes que se van desplazando lenta y continuamente para pastar, tiene un contenido de proteínas mucho más alto que la humana, por ejemplo, cuyas crías nacen preparadas para estar sobre la madre y tomar leche d forma continua.
Por respeto a las necesidades de todas las crías, las nuestras y las del resto de mamíferos, y por su salud, cada especie con su leche.
Por respeto, al dolor de una madre a la que separan de su hijo, no seamos cómplices de la industria que lo fomenta.
(Imagen de “Vegan Food for Thought)
“Educando en el respeto, educando por la vida”